Dedicado a Corita Olivares
Para destacar las muchas virtudes de Corita, por su profundo amor hacia su familia, en Chile y Canadá; y por su prójimo, por su amable sonrisa; por su bondad sin prejuicios ni límites y por su devoción al Señor Jesucristo, a su bendito Dios misericordioso, he escrito este poema dedicado a su bella persona:
No se ha marchado
No ha languidecido la más preciosa de las rosas,
No se ha extinguido el brillo de su sol ni de su luna, ni de sus estrellas.
Su diamante de vida permanecerá intacto e inmaculado, y
Jamás se apagará su resplandor.
No se ha desvanecido su arcoíris colmado de maravillosos secretos, tesoros y colores.
Hay esperanza, fe, paz, espiritualidad,
Nuevos amaneceres y promesas divinas.
Al final de su arco multicolor
Existe un pacto de su Dios con el hombre,
Con esa humanidad que Corita tanto ha amado.
Ella ha muerto para continuar viviendo,
Porque la muerte es vida eterna.